Iniciativas de ACNUR y sus socios garantizan los derechos de las poblaciones indígenas refugiadas en Brasil
Iniciativas de ACNUR y sus socios garantizan los derechos de las poblaciones indígenas refugiadas en Brasil
BRASILIA, Brasil – Desde que diversas poblaciones indígenas refugiadas de Venezuela empezaron a llegar a Brasil en busca de protección internacional, la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) ha sido precursora en acogerlas y brindarles protección. Más allá de la respuesta en las zonas fronterizas, ACNUR acompaña el despliegue de la movilidad de estos grupos en Brasil, desde la perspectiva de la garantía de los derechos y la preservación cultural, buscando consolidar medios para su integración socioeconómica.
En noviembre de 2022, en Brasil había más de ocho mil personas indígenas procedentes de Venezuela, las cuales fueron registradas por ACNUR en varios estados brasileños (principalmente en Roraima, Amazonas y Pará). En su mayoría, estos grupos indígenas refugiados se componen de cinco etnias; las más representativas, en términos poblacionales, son la warao (70% del total) y la pemón (24%), seguidas de las etnias e’ñepá, kariña y wayúu. En esta página de ACNUR se detallan algunas características de cada grupo étnico.
“ACNUR ofrece protección a las poblaciones indígenas refugiadas adaptándose a sus particularidades étnicas y culturales, valorando sus conocimientos tradicionales, garantizando el acceso a sus derechos y buscando consolidar con los socios alternativas para su autonomía, siempre con respeto a sus identidades y autodeterminación”, afirma Davide Torzilli, representante de ACNUR en Brasil.
A continuación se listan algunas iniciativas emprendidas por ACNUR en favor de estas poblaciones; todas ellas se han revisado y adaptado constantemente a las demandas, partiendo de la escucha activa y el diálogo con los diferentes grupos étnicos.
Albergue y adaptación
Entre los servicios que ofrece ACNUR a las poblaciones indígenas refugiadas y migrantes se encuentran albergues adaptados a las necesidades culturales, como cocinas comunitarias, hamacas para descansar y pernoctar, así como espacios para la promoción cultural y el suministro de kits de higiene y limpieza. El modelo de convivencia de los albergues indígenas de Boa Vista, Pacaraima y Manaos se estableció con la participación de esta población y con respeto a la autoorganización de los grupos étnicos. En estos albergues, los equipos de gestión mantienen canales de comunicación constantes con la comunidad refugiada, que incluyen reuniones periódicas con líderes y comités comunitarios, así como asambleas generales con toda la comunidad. Con asistencia social y ayuda económica para cubrir sus necesidades básicas inmediatas, ACNUR puede apoyar a las personas indígenas que deciden abandonar los albergues. De este modo, ACNUR y sus socios promueven la autonomía, la participación efectiva y el empoderamiento de las personas refugiadas en las decisiones que afectan sus vidas.
Acompañamiento de grupos indígenas fuera de los albergues
Además de la población indígena refugiada en albergues, ACNUR acompaña a grupos indígenas refugiados que han sido acogidos por las comunidades indígenas taurepang, cerca de la frontera de Brasil con Venezuela. En estas comunidades, ACNUR lleva a cabo acciones que alcanzan aproximadamente a 1.200 personas y que fomentan la autonomía, la dignidad y la protección de los indígenas, lo que incluye la distribución de artículos de primera necesidad, el apoyo en el acceso a la documentación y la asistencia social, el fortalecimiento de proyectos de generación de ingresos y soberanía alimentaria, y la participación de las comunidades en iniciativas para fortalecer los derechos comunitarios y la integración a través del deporte. En Manaos, ACNUR y sus socios están mapeando permanentemente a las 700 personas indígenas refugiadas, aproximadamente, que viven en la ciudad; además, promueven procesos consultivos y de fortalecimiento comunitario con la participación activa de la población indígena y de los residentes de las zonas de acogida.
Diálogos y escucha activa
Para que las familias reciban la información necesaria en su lengua y para orientar mejor los abordajes a las necesidades específicas de esta población, los equipos en los albergues para poblaciones indígenas cuentan con intérpretes comunitarios y con antropólogos. Además, los materiales producidos para esta población se traducen a las lenguas originarias, con un enfoque intercultural en la transposición de la información, como la Cartilla para tratar temas de salud con personas indígenas, las guías de servicios de salud (como las de Belém y Ananindeua, en Pará) y los contenidos que se difunden en formato audio.
Capacitar al funcionariado y reforzar las buenas prácticas
ACNUR trabaja con sus socios en la movilización e incidencia ante las autoridades públicas municipales, estatales y federales para capacitar a los equipos de asistencia; facilitar el acceso a documentación, servicios públicos, políticas específicas y diferenciadas; y proporcionar información precisa y actualizada sobre el perfil, los hábitos y las tradiciones de las poblaciones indígenas refugiadas en el país. Algunos ejemplos de productos elaborados son la Guía de referencia para el trabajo social con poblaciones indígenas refugiadas y migrantes, el informe sobre buenas prácticas de las redes locales de apoyo a la población indígena warao en el sudeste y el sur de Brasil, y los Derechos de las poblaciones indígenas refugiadas y migrantes.
Autosuficiencia socioeconómica respetando las tradiciones
ACNUR apoya económicamente a los núcleos familiares de diferentes grupos indígenas como forma de garantizar su acceso a derechos básicos; también fomenta las iniciativas asociativas de esta población como mecanismo para promover su autoestima y autosuficiencia. El apoyo de ACNUR a la integración socioeconómica de la población indígena refugiada conlleva estudiar el perfil de esta, analizar el valor de la artesanía tradicional como fuente de ingresos para la población indígena, proporcionar capacitación para la innovación en ventas y mercadotecnia digital, así como garantizar el rescate y la preservación de las culturas ancestrales.
La articulación de todas las iniciativas enumeradas, el diálogo constante con los diferentes grupos étnicos – basado en el respeto a sus tradiciones – y la consolidación de alianzas con los sectores público y privado son las bases de las acciones de ACNUR para garantizar la preservación de sus identidades, asegurando su autonomía y conocimientos tradicionales como forma de promover el proceso de integración local de esta población.