Tres jóvenes en España premiados en el Concurso de Arte "Juventud con los Refugiados" de ACNUR
Tres jóvenes en España premiados en el Concurso de Arte "Juventud con los Refugiados" de ACNUR
ACNUR, la Agencia de la ONU para los Refugiados, ha anunciado hoy los ganadores del segundo Concurso de Arte “Juventud con los Refugiados”. Bajo el lema “el deporte nos une”, el concurso, lanzado el pasado mes de mayo, animaba a jóvenes de 10 a 30 años a enviar sus dibujos para mostrar cómo el deporte puede generar esperanza.
Entre los más de 1.600 dibujos recibidos de 100 países, un jurado formado por personas refugiadas, artistas y atletas ha escogido los diseños de Cámara, Carles y Shiming. Tres jóvenes que nos muestran el futuro con esperanza. Un futuro en el que estaremos más unidos. Ellos mismos nos explican el significado de sus creaciones.
Cámara, 19 años, refugiado maliense afincado en Alicante: Ganador Categoría General
Cámara llegó a España hace dos años huyendo de la situación de inestabilidad en Mali y ahora vive en Alicante como refugiado. Es uno de los 10 ganadores del concurso de arte de ACNUR. Artista y futbolista, el concurso de este año parecía hecho a medida para él. “El dibujo me representa a mí. Yo soy migrante y deportista. He pasado momentos difíciles, pero he vivido en primera persona cómo el deporte ayuda a las personas refugiadas a integrarse”, explica el joven.
Con mucho cariño nos detalla todos los elementos que podemos ver en su creación: varias disciplinas deportivas que simbolizan distintas oportunidades de integrarse en Europa, él mismo, representado en grande como futbolista, y manos de varios colores que muestran las distintas nacionalidades y culturas de personas que llegan a España. Todo sobre los tonos amarillos y rojos de la bandera española, país que le ha acogido.
Fascinado por Picasso, dibuja desde pequeñito. “Aunque nadie me ha enseñado nunca a pintar”, confiesa. Sus coloridos dibujos nos transportan a la naturaleza de su Mali natal, al pueblo donde creció y donde su padre le llevaba a cazar, y al viaje que tuvo que emprender hasta encontrar seguridad en España. Algunos elementos se repiten en todas sus creaciones: la mezcla de culturas y la importancia de la igualdad entre todas las personas, sean del color que sean.
Dibujando, cuenta, se siente feliz. “Dibujar me ayuda a olvidar todo lo que he pasado”.
Solo hay una pasión que le mueve más que pintar: el fútbol. El año pasado el joven empezó a jugar con un equipo en Alicante. “Al principio fue difícil porque no hablaba español y me costaba mucho entender lo que decía el entrenador”. Poco a poco pudo ir demostrando su experiencia en el campo. “Lo bueno del fútbol es que, si tienes experiencia, juegas más que hablas”, reconoce bromeando.
Este año ha empezado a jugar para un equipo más cerca de casa, con compañeros nuevos. “Aunque mis antiguos compañeros me siguen llamando para que vuelva al equipo y seguimos jugando algunos partidos”, explica, orgulloso. Mientras juega solo piensa en marcar, hacer equipo y subir de categoría.
Cámara está muy comprometido con todas las asociaciones que le han acompañado desde su llegada a España. Agradece una y otra vez el trabajo que organizaciones como Geum Dodou, en Melilla y Maletas de Cartón, en Madrid, hacen con chicos migrantes y refugiados como él. “Para mí son como mis padres”, afirma. Silvia Gabriele, fundadora de la asociación Maletas de Cartón, es un gran apoyo para Cámara. “Su talento es fundamental para transmitir la esencia de nuestra asociación y para poner en valor los recursos que aportan las personas que llegan a España”, asegura Silvia. El joven incluso ha colaborado diseñando el logo de la organización. “Cámara tiene una gran sensibilidad hacia otras personas que se han visto obligadas a dejar sus países”.
De la mano de Maletas de Cartón, el joven tiene muchos proyectos para sus dibujos: creación de cuadernos, marcapáginas… “Lo que me gustaría es pintar muchos cuadros y poder dedicarme a ser artista y futbolista a la vez”, afirma.
Al resto de jóvenes migrantes y refugiados, Cámara les quiere transmitir un mensaje de esperanza: hay que ser fuertes. “No podemos olvidar los sueños que tenemos en nuestra cabeza, hay que seguir luchando”.
Carles, 13 años, Valencia: Mención Especial Categoría Balón Soñado
A Carles, valenciano de 13 años, le encantan la escalada y la bicicleta. Fue su madre quien le propuso participar en el concurso de arte de ACNUR y no se lo pensó dos veces. Su dibujo simboliza “la unión entre las personas en tiempos complicados”, explica el joven. Por eso en su diseño las personas aparecen cogidas de la mano, unas en tierra (sobre fondo verde) y otras en el mar (con fondo azul). Unidas como cuando practicamos deporte, cuando todos formamos parte de un mismo equipo. “Para las personas refugiadas”, reflexiona Carles, “el deporte puede significar hacer algo fuera de su rutina o simplemente divertirse”.
Shiming, 13 años, Mollet del Vallès: Mención Especial Categoría General
Shiming también ha ganado una mención especial en el concurso. El joven de 13 años de Mollet del Vallès, Cataluña, ha querido mostrar con su dibujo que todos somos iguales frente al deporte. En el campo se compite, pero practicar deporte “hace que nos entendamos más y que hagamos nuevos amigos”, asegura. Shiming se animó a participar en el concurso de ACNUR a través de su escuela, cuando la profesora de inglés les presentó la oportunidad en clase.
Puedes ver todos los dibujos ganadores en esta exhibición virtual.
Para más información sobre los ganadores del concurso, pincha aquí.
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