El Secretario General de la ONU insta a una mayor solidaridad con los desplazados en Mosul

CAMPAMENTO DE HASANSHAM, Irak, 31 de marzo de 2017 (ACNUR) -- El Secretario General de las Naciones Unidas, António Guterres, pidió hoy a la comunidad internacional que haga más para ayudar a la población que sufre en Mosul, donde centenares de miles de personas han sido forzadas a huir de sus hogares a causa de los combates por el control de la segunda ciudad Irak. "Estas personas han sufrido enormemente y siguen sufriendo. Necesitamos más solidaridad de la comunidad internacional", declaró António Guterres durante una breve visita al campamento de Hasansham U3 en el norte de Irak, el cual alberga a más de 9.000 personas obligadas a huir de sus hogares en Mosul.

"Se ha realizado un gran esfuerzo por parte del gobierno regional (del Kurdistán), un gran esfuerzo por parte de las ONG, un gran esfuerzo de las agencias de la ONU, pero no tenemos los recursos necesarios para ayudar a estas personas", agregó.

António Guterres, que durante una década desempeñó el cargo de Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados -- de 2005 a 2015-, llegó a Irak en un momento en que el conflicto en Mosul ha expulsado de sus hogares a un número récord de civiles.

"Estas personas han sufrido enormemente y continúan sufriendo. Necesitamos más solidaridad por parte de la comunidad internacional"

Más de 350.000 personas han sido desplazadas de la ciudad y sus alrededores desde que comenzaron las operaciones militares el 17 de octubre. De ellas, 76.000 ya han regresado. Entre las personas que actualmente se encuentran desplazadas en Mosul, casi tres cuartas partes -- algo más de 286.000-, se han visto forzadas a desplazarse desde el oeste de Mosul desde que el 19 de febrero comenzaron las operaciones para retomar la parte occidental de la ciudad.

En un momento en que se necesita una "profunda solidaridad" con Irak por parte de la comunidad internacional, Guterres indicó que las operaciones de Naciones Unidas en el país están financiadas sólo en un 8%. "Esto demuestra lo limitados que son nuestros recursos si se comparan con la tragedia a la que se enfrentan estas personas", dijo.

El recrudecimiento de los combates en el oeste de Mosul y la escasez extrema de alimentos han provocado un incremento del número de familias que huyen con lo puesto.

En respuesta a la crisis de desplazamiento que se está desarrollando, ACNUR, la Agencia de la ONU para los Refugiados, está acelerando la construcción de nuevos campamentos y ampliando otros campamentos en previsión a una nueva afluencia masiva en las próximas semanas que podría alcanzar las 250.000 personas.

Este fin de semana abrirá sus puertas un nuevo campamento en Hammam al-Alil 2 con el objetivo de ayudar a aliviar el hacinamiento en un campamento ya existente, construido por el gobierno. El campamento es también el principal centro de tránsito e identificación para las familias que han huido del oeste de Mosul. El campamento albergará inicialmente a 10.000 personas, con capacidad de expandirse para albergar hasta 30.000 personas. Otro campamento, Hasansham U2, se abrirá a mediados de abril, para albergar a 9.000 personas.

Concluyendo su visita, Guterres hizo hincapié en que era necesaria la solidaridad tanto con aquellos que están liberando Mosul, como con los civiles que sufren, todo ello en "cooperación para garantizar la protección de esos civiles y, al mismo tiempo, siendo solidarios con las víctimas y creando las condiciones para la reconciliación.

"Todo esto requiere de un compromiso mucho mayor por parte de la comunidad internacional, y ese compromiso no significa sólo ser generoso. Al contrario, es en aras del interés común, porque las amenazas terroristas que vemos en Mosul son las mismas amenazas terroristas que vemos por todo el mundo".

Por Caroline Gluck