Casi medio millón de personas desplazadas por el conflicto y la violencia en Burkina Faso
Casi medio millón de personas desplazadas por el conflicto y la violencia en Burkina Faso
La Agencia de la ONU para los Refugiados, ACNUR, se suma a sus socios para lanzar una advertencia sobre la crisis humanitaria que se está desencadenando en las regiones central y norte de Burkina Faso, donde a diario las vidas de cientos de miles de personas civiles se ven afectadas por la inseguridad y la violencia. Unas 486.000 personas se han visto forzadas a huir en el interior del país, 267.000 de ellas solo en los últimos tres meses. Además, otras 16.000 han tenido que buscar refugio en los países vecinos.
La escalada de la violencia armada está causando una emergencia humanitaria sin precedentes en el Sahel. En una visita a Kaya, al noreste de Uagadugú, y a Barsalogho, en la provincia central de Sanmatenga, ACNUR pudo constatar el drama del impacto de estos trágicos acontecimientos sobre la población.
Miles de personas se están desplazando, agotados y tratando de encontrar un lugar seguro con familias de acogida o en campos formales de tránsito y de viaje. Muchas se han desplazado en repetidas ocasiones. Las perspectivas de regresar de inmediato a sus lugares de origen son escasas. Como resultado, se están disparando sus necesidades y las de las familias de acogida, que ya se encuentran en una situación de vulnerabilidad por las crisis alimentarias y nutricionales en la región. Las mujeres y adolescentes hacen frente a amenazas específicas por la ausencia de atención sanitaria y otros servicios básicos.
Las personas a las que ha conocido ACNUR han soportado situaciones terribles y traumáticas. Según los datos, más de 500 personas han sido asesinadas en 472 ataques y operaciones contra-militares desde el año pasado. ACNUR ha tenido noticias de que servicios básicos como la atención sanitaria y la educación o la libertad de movimiento se han visto gravemente afectados por los ataques y la inseguridad generalizada.
En estos momentos, las 13 regiones de Burkina Faso acogen a personas que huyen de la violencia. La región del Centro-Norte acoge al mayor número de personas desplazadas, con más de 196.000 solo en la provincia de Sanmatenga, seguida por la región del Sahel, con 133.000 personas en la provincia de Soum. Cerca de un millón y medio de personas tienen necesidad urgente de recibir asistencia humanitaria en el país. Desde ACNUR también existe una gran preocupación por los 31.000 refugiados de Malí que también se encuentran afectados por este conflicto.
Hay un aspecto completamente claro: las necesidades humanitarias van aumentando a la misma velocidad que el propio conflicto y la inseguridad sigue arruinando las vidas de cientos de miles personas. Las comunidades de acogida ya están empobrecidas, están viviendo en una situación muy precaria. Se deben coordinar y reforzar de inmediato las capacidades de alojamiento, atención médica, alimentos y agua si se quiere evitar otra tragedia dentro de esta tragedia. La desnutrición y la hambruna son una amenaza real.
Se necesitan de manera urgente recursos para lanzar una respuesta humanitaria coordinada, aspecto que constituye una necesidad inmediata para salvar vidas.
Los grupos armados también han intensificado sus ataques en los países vecinos a Burkina Faso: Malí y Níger. Las regiones en torno a las fronteras de los tres países se han convertido en nuevos focos de violencia. Los grupos armados operan en regiones poco pobladas y empobrecidas que cuentan con escasa presencia gubernamental, y están traspasando fronteras y expandiendo sus áreas de influencia. En 2019, los ataques ya se han extendido a Benín. En total, 5,4 millones de personas en las regiones afectadas necesitan asistencia de manera urgente, incluyendo a 3,2 millones de personas en Malí y a 700.000 al oeste de Níger.
En paralelo a la reunión del Comité Ejecutivo anual de ACNUR celebrado esta semana, el Alto Comisionado de ACNUR presenció la reunión de los representantes gubernamentales de Burkina Faso, Malí, Níger, Chad y Mauritania, en la que reafirmaron su compromiso de trabajar de forma conjunta para dar respuesta a los desplazamientos y asegurar que las personas que huyen de la violencia puedan encontrar total seguridad en sus propios países y más allá de sus fronteras. Dichos compromisos se extraen de las conclusiones de los Diálogos de Protección en el Sahel, organizados el mes pasado en Bamako por ACNUR y el Gobierno de Malí.
Para más información sobre este tema, por favor contactar:
- En Dakar, Romain Desclous, [email protected], +221 786 396 385
- En Ginebra, Charlie Yaxley, [email protected], +41 79 580 8702
- En Ginebra, Babar Baloch, [email protected], +41 79 513 9549