ACNUR evalúa las necesidades de los desplazados en el oeste de Siria

GINEBRA, 31 de Mayo (ACNUR) – En tanto que aumenta la cantidad de sirios que abandonan su país, la agencia de las Naciones Unidas para los refugiados continúa ofreciendo ayuda, en medio de dificultades operativas y desafíos concernientes a la seguridad, a aquellos sirios que permanecen dentro del país en un estado de desesperación total.

Durante una semana en la cual el número de refugiados sirios en países vecinos excedió la cantidad de 1,6 millones, el miércoles el ACNUR se unió a una misión interagencial liderada por la Media Luna Roja Árabe Siria para evaluar la situación y las necesidades de las familias desplazadas internamente a Hasiya, una ciudad de 16.000 habitantes del centro-oeste de Siria.

"ACNUR fue testigo de la terrible situación humanitaria en la que viven estas familias desplazadas", dijo el vocero Dan McNorton a los periodistas en Ginebra, y añadió que estas familias provienen de Al-Qusair, ciudad situada a 25 kilómetros.

Los intensos enfrentamientos de las últimas tres semanas en Al-Qusair obligaron a huir a mucha gente. Al menos unas 700 familias, o 3.500 personas, encontraron refugio en Hasiya. La mayoría de ellas son mujeres y niños. Otros cruzaron al Líbano. Desde el 8 de Mayo, el personal de ACNUR en Líbano registró 3.000 refugiados provenientes de Al-Qusair, aunque probablemente el número actual sea mayor.

McNorton indicó que el equipo interagencial visitó varios sitios donde ahora viven 150 familias, aproximadamente. Estas familias se han alojado en tres escuelas y en un edificio sin terminar, así como también en carpas donadas por la población de Hasiya.

Los miembros del equipo se mostraron preocupados por el bienestar de las personas que vieron. "Debido a las pobres condiciones sanitarias y de higiene en las que vive la gente, muchos, especialmente niños, sufren de diarrea, problemas respiratorios, fiebres altas, infecciones de oído y enfermedades de piel", dijo McNorton. "La clínica más cercana está a 40 minutos de allí", indicó.

ACNUR envió tres días antes artículos básicos de ayuda, como mantas y colchones, a 500 familias. "Sin embargo, las necesidades continúan siendo enormes, y ACNUR está evaluando como poder enviar más de estos elementos a fin de cubrir las necesidades de aquellos que siguen llegando", dijo el vocero.

Las familias en Hasiya indicaron que necesitan urgentemente leche, pañales, suplementos médicos y refugios adecuados. El agua llega al pueblo escasamente y es insuficiente para la población en crecimiento. Muchos de los habitantes del lugar y de la población desplazada dependen del agua que la Media Luna Roja Árabe Siria lleva en camiones una vez por semana.

McNorton indicó que, durante la visita, y junto a las autoridades locales, ACNUR identificó un edificio que podría ser un lugar seguro para refugiar a los desplazados por los enfrentamientos en Al-Qusair. También podría ser utilizado para distribuir elementos esenciales de ayuda, tales como colchones, colchonetas, mantas, elementos de cocina y elementos de higiene y sanidad.

El Programa Mundial de Alimentos (PMA), el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) y la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios también formaron parte de la misión a Hasiya.

Gracias a la Voluntaria en Línea Marianela Oyarzabal por el apoyo ofrecido con la traducción del inglés de este texto.