ACNUR conmocionado por los testimonios de los supervivientes de la tragedia en el Mediterráneo

Estamos conmocionados tras escuchar ayer los testimonios de cinco eritreos que aparentemente son los únicos supervivientes de una embarcación que partió desde Libia hace unos 20 días. De acuerdo con su relato, quedaron a merced del mar sin combustible, agua, ni comida.

Según los supervivientes, unas 80 personas, en su mayoría procedentes de Eritrea, embarcaron en una patera en Trípoli con el objetivo de llegar a Italia. Tras tres días en el mar, la embarcación se quedó sin combustible y unos pocos días más tarde, se agotaron el agua y la comida. A medida que avanzaban la sed y el hambre, los ocupantes de la embarcación empezaron a morir, uno por uno, mientras el barco seguía a la deriva. Según iban muriendo los pasajeros, los supervivientes arrojaban sus cuerpos al mar.

Conforme a los testimonios de los cinco eritreos, un barco de pesca se encontró con los cinco supervivientes y les ofreció un poco de pan y agua, aunque los abandonó. El 20 de agosto, la Guardia di Finanza (Servicio de Vigilancia Aduanera italiano) localizó la embarcación. Los supervivientes se encontraban en pésimas condiciones de salud y fueron trasladados a Italia para recibir tratamiento médico.

Además de tratarse de una tragedia sobrecogedora, este hecho supone un motivo de preocupación para ACNUR, ya que estas personas se habrían cruzado con muchas embarcaciones sin que ninguna de ellas les prestara ningún tipo de ayuda. Este suceso se opone a la antigua tradición marítima de rescate en el mar, que se encuentra amenazada y que se está viendo cada vez más mermada.

ACNUR se muestra preocupado ante la posibilidad de que el endurecimiento de las políticas gubernamentales hacia los inmigrantes que tratan de llegar por mar pueda tener un efecto desalentador sobre los capitanes de barco en lo referente a seguir cumpliendo con las obligaciones marítimas internacionales.