Declaración de Nueva York para los Refugiados y Migrantes
Declaración de Nueva York para los Refugiados y Migrantes
Esta declaración reafirma la importancia del esquema de protección internacional para las personas refugiadas y establece una serie de compromisos que los Estados miembro asumieron para fortalecer y mejorar los mecanismos de protección de las personas en situación de movilidad humana.
La Declaración de Nueva York constituye un compromiso político de gran fuerza y resonancia, pues cierra una brecha perenne en el sistema de protección internacional, es decir, una verdadera distribución de cargas y responsabilidades en favor de las personas refugiadas.
Al adoptar la Declaración de Nueva York, los Estados miembro:
Manifestaron profunda solidaridad hacia las personas forzadas a huir
Reafirmaron la obligación que tienen de respetar, sin distinción alguna, los derechos humanos de las personas refugiadas y migrantes
Se comprometieron a apoyar a los países afectados por movimientos de gran proporción de personas refugiadas y migrantes
Convinieron que proteger a las personas refugiadas y apoyar a los países que las acogen constituyen responsabilidades internacionales que deben compartirse y distribuirse de manera más equitativa y predecible
Acordaron los elementos fundamentales del Marco de respuesta integral para los refugiados (Anexo 1 a la Declaración de Nueva York para los Refugiados y los Migrantes)
Convinieron trabajar por la adopción del Pacto Mundial sobre los Refugiados y del Pacto Mundial para la Migración Segura, Ordenada y Regular
Marco de respuesta integral para los refugiados
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La Declaración de Nueva York detalla los elementos esenciales del Marco de respuesta integral para los refugiados, que se aplicará a desplazamientos de gran escala y situaciones prolongadas.
El Marco de respuesta integral para los refugiados se centra en la importancia de apoyar a los países y comunidades que han dado acogida a un gran número de personas refugiadas, de promover la inclusión de estas personas en las comunidades de acogida, de garantizar el involucramiento de los actores del desarrollo en etapas tempranas, y de adoptar un enfoque que involucre a toda la sociedad en la respuesta a la situación de las personas refugiadas.
El Marco de respuesta integral para los refugiados persigue cuatro objetivos:
- aliviar las presiones sobre los países y las comunidades de acogida;
- promover la autosuficiencia de las personas refugiadas;
- ampliar el acceso a soluciones en terceros países; y
- favorecer, en los países de origen, circunstancias que propicien un retorno en condiciones dignas y seguras.
Desde la adopción de la Declaración de Nueva York, ACNUR ha estado colaborando con diversos Estados y con otras partes interesadas en el desarrollo y aplicación práctica del Marco de respuesta integral para los refugiados en varios países.
Hacia febrero de 2018, el Marco de respuesta integral para los refugiados ya se venía aplicando formalmente en una docena de países, incluidos dos contextos regionales en África y Centroamérica.
Pacto Mundial sobre los Refugiados
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Además de crear el Marco de respuesta integral para los refugiados, la Declaración de Nueva York insta al Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados a proponer un pacto mundial sobre los refugiados en el informe anual que debía presentar, en 2018, ante la Asamblea General de las Naciones Unidas.
El primer borrador del pacto mundial sobre los refugiados se publicó a finales de enero de 2018, y los Estados miembro hicieron consultas formales hasta julio de ese mismo año.
Este instrumento parte del Marco de respuesta integral para los refugiados y detalla medidas prácticas que podría tomar una amplia gama de partes interesadas para fortalecer la cooperación internacional en respuesta a situaciones prolongadas y movimientos de refugiados de gran proporción, así como garantizar que las cargas y responsabilidades inherentes en la protección de las personas refugiadas se distribuyan de una forma más equitativa y predecible.
Pacto Mundial para una Migración Segura, Ordenada y Regular
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La Declaración de Nueva York también establece el proceso de negociación de un pacto mundial para una migración segura, ordenada y regular, que se adoptó en 2018. Si bien ambos procesos se ejecutarán al mismo tiempo, la Asamblea General decidió que estos son “separados, distintos e independientes”.
El pacto mundial para la migración mejorará la coordinación con respecto a la migración internacional y presentará un marco de cooperación internacional integral con respecto a las personas migrantes y la movilidad humana.
En la Declaración de Nueva York se solicita al ACNUR participar en este proceso, así como intervenir en la elaboración de principios no vinculantes para las personas migrantes en situación de vulnerabilidad. Algunas cuestiones en las que ACNUR está contribuyendo incluyen respuestas a flujos de refugiados y migrantes, protección de migrantes en países en crisis y otras situaciones de vulnerabilidad, y desplazamiento debido al cambio climático y desastres naturales.
ACNUR colaborará estrechamente con diversas partes interesadas en cuanto a la complementariedad de ambos pactos mundiales; en concreto, en relación con temas transversales que afectan a refugiados y migrantes, como la trata y el tráfico de personas, los rescates en el mar, la recopilación y el análisis de datos, y el fortalecimiento de la tolerancia.
Cumbre de Líderes sobre los Refugiados
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Tras la adopción de la Declaración de Nueva York, el 20 de septiembre de 2016, el Secretario General de la ONU y siete Estados miembro copresidieron la Cumbre de Líderes sobre Refugiados para impulsar la distribución mundial de cargas y responsabilidades en favor de las personas refugiadas.
En la Cumbre, 47 Estados se comprometieron a realizar cambios legales y de políticas para mejorar el acceso de los refugiados a la educación, a un trabajo digno y a servicios sociales; aumentar, de manera sustancial, la ayuda humanitaria; y ampliar el acceso a soluciones en terceros países, como el reasentamiento u otras vías complementarias.