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Nunca había manejado en su vida. Ahora es una conductora de autobuses en una de las ciudades con más tráfico del mundo

Historias

Nunca había manejado en su vida. Ahora es una conductora de autobuses en una de las ciudades con más tráfico del mundo

Adriana no sabía manejar ningún tipo de vehículo. Ahora, gracias a un programa apoyado por ACNUR, conduce con destreza un moderno autobús en las congestionadas calles de Bogotá.
7 October 2024
Una mujer al volante en un autobús

Adriana desde su asiento en el autobús al empezar su jornada de trabajo.

Bogotá es una de las ciudades más congestionadas del mundo, y conducir en sus calles puede ser una verdadera odisea. A pesar de ello, Adriana Linares (36), venezolana que llegó a Colombia hace cinco años, se convirtió en conductora experta y encontró empleo como operadora de transporte público en la empresa “La Rolita”.

“Cada día que llego al trabajo aún siento susto porque cada día es diferente. Pero, cuando abro las puertas del bus y la gente sube, sobre todo los niños, y me agradecen, siento que he hecho bien mi trabajo. Eso me motiva a hacerlo mejor”, comparte Adriana.

Desde que se vieron forzados a dejar su país, Adriana, su esposo y sus dos hijos han vivido intensamente su proceso de integración en Colombia. Como más de dos millones de venezolanos en ese país, han tenido que empezar una nueva vida sin documentación, sin una vivienda, sin empleo, sin acceso a servicios esenciales como educación y salud.

Adriana, que en Venezuela era docente de primaria, habla con tranquilidad, pero sus ojos se humedecen cuando recuerda sus primeros años en Bogotá. “Al inicio, tratamos de sobrevivir haciendo lo que fuera con mi esposo: vendíamos comida en la calle para pagar nuestros gastos. Muchas veces no alcanzábamos a reunir lo suficiente para el arriendo”, cuenta Adriana.

Una mujer sentada en un asiento de un autobús vacío

Adriana, sentada en uno de los autobuses de ‘La Rolita’ antes de empezar su jornada.

En la última década, Colombia ha acogido cerca de 2,8 millones de personas refugiadas y migrantes venezolanas, siendo Bogotá la principal ciudad anfitriona de personas con necesidades de protección internacional.

En el camino de integración de millones de refugiados y migrantes de Venezuela aún persisten barreras, y son limitadas las oportunidades de empleo y acceso a medios de vida dignos. A pesar de este enorme reto, las autoridades colombianas impulsan medidas ejemplares para acoger e integrar a esta población. A 2023, según la Plataforma R4V, se entregaron a la población refugiada y migrante en Colombia cerca de 1,9 millones de Permisos de Protección Temporal (PPT); Adriana y su familia están entre quienes se beneficiaron de esta medida.

Una mujer conduce un autobús

En 2023, el destino de Adriana y de su familia en Colombia cambió de manera radical cuando ella decidió participar en el programa Manejando Juntos, impulsado por la Alcaldía de Bogotá en alianza con ACNUR, la Agencia de la ONU para los Refugiados. 

“Entré al programa Manejando Juntos desde cero. Yo no sabía conducir ningún tipo de vehículo. Al principio tuve desconfianza y miedo, pero tuve el acompañamiento de ACNUR en todo momento. Tuvimos apoyo psicosocial, apoyo monetario, capacitación y financiamiento para obtener nuestra licencia de conducción”, destaca Adriana.

Manejando Juntos es una iniciativa que apoya La Rolita, el primer operador público del sistema de transporte de Bogotá. Entre 2023 y 2024, esta alianza ha permitido que personas refugiadas y migrantes puedan obtener un empleo formal como conductores de transporte público, con la doble ventaja de generar ingresos para mantener a sus familias y suplir la escasez de conductores en la ciudad. 

El programa ha logrado que cerca de 70 personas accedan a un empleo formal; más de la mitad de ellas son mujeres. Además, en el programa participan tanto personas refugiadas y migrantes como miembros de las comunidades de acogida. 

“Tengo una mejor estabilidad para mi familia, para mis hijos; en cuanto a salud, caja de compensación, cesantías y todos los beneficios de ley. Hace poco también realicé un registro para un programa de vivienda”, cuenta Adriana con una sonrisa que irradia positivismo y alegría.

Según datos del Departamento Administrativo Nacional de Estadísticas (DANE), 8 de cada 10 personas refugiadas y migrantes venezolanas tienen la intención de permanecer en Colombia. Por ello, las necesidades de soluciones duraderas que favorezcan su integración son cada vez mayores. ACNUR trabaja junto con autoridades y socios locales para que las personas refugiadas y migrantes puedan reconstruir sus vidas en su nuevo hogar.

"La Rolita ha sido una de las puertas más grandes que Colombia me ha podido abrir".

Adriana, conductora de autobús