El operador de telecomunicaciones Lebara apoya la educación de niños desplazados
El operador de telecomunicaciones Lebara apoya la educación de niños desplazados
LONDRES, Reino Unido, 2 de agosto (ACNUR) – Un operador de telecomunicaciones líder en Europa, Lebara, ha lanzado esta semana una campaña de recaudación de fondos para apoyar los programas que lleva a cabo ACNUR con el fin de ayudar a más de 100.000 niños desplazados para que vayan a la escuela en seis países del mundo.
La compañía, con sede en Reino Unido, y como parte de las celebraciones de su décimo aniversario, tiene previsto recaudar 600.000 euros en ocho países donde opera: Australia, Dinamarca, Francia, Alemania, los Países Bajos, España, Suiza y el Reino Unido. Muchos de sus clientes en estos países son inmigrantes o refugiados.
Los fondos recaudados se emplearán para ayudar a los niños desplazados en Colombia, Ghana, India, Pakistán, Filipinas y Turquía, en los gastos escolares como uniformes, transporte y libros. La donación también permitirá dar clases de idiomas, formación profesional y educación para los niños.
La contribución de Lebara también ayudará a ACNUR a incrementar las tasas de escolaridad y a empoderar a las niñas mediante la promoción de su acceso a la educación. "Estamos agradecidos por este apoyo crucial de Lebara. Juntos podemos ayudar a que los niños afectados por el desplazamiento forzoso tengan acceso a un derecho básico como es la educación" dijo Roland Schilling, Representante de ACNUR en Reino Unido.
Lebara espera también recaudar otros 400.000 euros más para apoyar programas de educación que lleva a cabo la Federación Internacional de la Cruz Roja y las Sociedades de la Media Luna Roja en Marruecos, Nigeria, Polonia y Rumanía.
Todos los niños bajo el mandato de ACNUR deben tener derecho a la educación. Sin embargo, un tercio de los niños refugiados del mundo todavía no tienen acceso a la educación primaria, y tres de cada cuatro no acceden a la educación secundaria. Otros problemas a los que se enfrentan son las clases masificadas, la carencia de materiales de estudio, la falta de reconocimiento de sus títulos de estudios, los planes de estudio restringidos y los profesores no cualificados.
La educación es una herramienta importante para romper el círculo del analfabetismo y la pobreza que a menudo deja a las familias refugiadas en un estado de desesperanza y desesperanza. Además, proporciona habilidades y conocimientos para un futuro mejor.