Guterres advierte: Aumenta población de refugiados casi permanentes

GINEBRA, 4 de octubre (ACNUR) – El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, António Guterres, advirtió hoy que la creciente extensión de los conflictos está creando nuevas situaciones de refugiados casi permanentes y declaró que esto exige un mejor y más amplio nivel de protección para los 43 millones de desplazados a la fuerza que existen en el mundo.

En el discurso que pronunció inaugurando la sesión anual del Comité Ejecutivo del ACNUR, dijo que la situación de los refugiados, desplazados internos, solicitantes de asilo, apátridas y demás personas que necesitan ayuda, se estaba volviendo cada vez más compleja.

"Estamos siendo testigos de la aparición de un considerable número de poblaciones de refugiados casi permanentes a nivel mundial," comentó. El año pasado fue el peor de las últimas décadas para la repatriación voluntaria de refugiados y esto tiene una explicación simple: la naturaleza cambiante e impredecible de los conflictos dificulta cada vez más la sostenibilidad de la paz".

Guterres destacó los ejemplos de Afganistán y Somalia, sacudidos intermitentemente por la guerra durante años:

"Los refugiados afganos están dispersos a lo largo de 69 países, un tercio de los países en el planeta. [Por su parte, en Somalia] no parece que se vaya a alcanzar la paz pronto. No creo que haya un grupo de refugiados tan sistemáticamente rechazado, tan estigmatizado y tan discriminado como este".

Guterres apeló a los miembros del Comité Ejecutivo para que renueven y amplíen su apoyo a aquellas personas afectadas por estas situaciones y a los principios de protección internacional sobre los que se sustenta el trabajo del ACNUR. Más de la mitad de los refugiados protegidos por el ACNUR se encuentra atrapada en situaciones prolongadas, la mayoría en países en vías de desarrollo, donde reside alrededor del 70% de los refugiados de todo el mundo.

"Necesitamos aumentar la solidaridad internacional y la repartición de las cargas," manifestó. Es absolutamente necesario que la comunidad internacional comprenda y conozca mejor el esfuerzo que realizan los países de acogida".

Guterres también hizo referencia al papel que están jugando las naciones más ricas mediante el aumento del reasentamiento de los refugiados que no pueden ser repatriados o que no pueden establecerse en los países de primer asilo. Doce nuevos países han adoptado programas de reasentamiento de refugiados desde junio de 2008. Sin embargo señaló que a pesar de este progreso, el aumento de las plazas para el reasentamiento no alcanza a cubrir las necesidades.

"Sigue existiendo una brecha entre las necesidades y la capacidad de reasentamiento," comentó Guterres. El ACNUR estima que al menos 800.000 refugiados necesitan reasentamiento, pero aún así el número de plazas disponibles por año cubre tan solo el diez por ciento de las necesidades, y menos del uno por ciento del número total de refugiados en el mundo".

Guterres también enfatizó las necesidades de otros grupos de personas desplazadas forzosamente. Entre ellos las víctimas de los desastres naturales, los 27 millones de desplazados dentro de su propio país a causa de conflictos y los aproximadamente 12 millones de personas alrededor del mundo que se encuentran en el limbo de la apatridia.

En el caso de los desastres naturales, el ACNUR con frecuencia se ha visto obligado a intervenir, como con las devastadoras inundaciones en Pakistán de este año. Guterres añadió que aunque el ACNUR haya acudido a la llamada en varias ocasiones, se necesita un enfoque menos ad hoc a la hora de hacer frente a los desastres naturales.

En relación con los desplazados internos, se refirió a la creciente cooperación entre agencias de las Naciones Unidas, la Cruza Roja y la Media Luna Roja y las organizaciones no gubernamentales a nivel nacional e internacional. Sin embargo, también recordó al público presente que la principal responsabilidad para hacer frente a los desplazados internos radica en los Estados y pidió que más países ratificasen la Convención para la protección y asistencia a los desplazados internos en África.

En cuanto a los apátridas, Guterres reconoció los esfuerzos de determinados países para adoptar medidas legislativas para reducir los riesgos de apatridia, como Vietnam, país donde ha sido recientemente naturalizado un grupo de antiguos refugiados de Camboya, o como Bangladesh, Zimbabwe, Kenya y Túnez, donde algunas reformas, disposiciones constitucionales (como en el caso de Kenya) y una reforma pendiente respectivamente reconocen el derecho de las mujeres de conceder la nacionalidad a sus hijos en las mismas condiciones que los hombres. Afirmó que el ACNUR aprovechará de la celebración de su sexagésimo aniversario para hacer cabildeo para extender aún más dichos progresos.

"El ACNUR está organizando para 2011 una capilar campaña de llamamientos para adoptar reformas legislativas de modo que tanto las madres como los padres puedan pasarle su nacionalidad a los hijos," manifestó, y para ello apelo a todos los Estados para que nos respalden en esta iniciativa".

La Agencia de la ONU para los Refugiados es financiada casi totalmente por contribuciones voluntarias. En los últimos años, ha llevado a cabo una serie de reformas internas con el objetivo de mejorar su eficiencia y eficacia. Entre otras cosas, ha reducido los gastos del personal y en 2010 ha empezado a aplicar a su presupuesto un enfoque basado en una evaluación más precisa de las necesidades de las personas asistidas.

Guterres indicó que las prioridades del ACNUR, tanto para este año como para los que están por venir, en cuanto al desarrollo de las capacidades operacionales de la organización deberían centrarse en la protección y en la respuesta a las situaciones de emergencia. Asimismo, instó a los donantes a aceptar estas prioridades y apoyarlas, en vez de vincular sus donaciones a propósitos más limitados:

"El ejercicio de Evaluación de las Necesidades Globales [desde un enfoque presupuestario] solo funcionará de la manera en que fue planeado si los donantes resisten la tentación de destinar sus contribuciones a actividades diferentes a las prioridades establecidas", dijo.

Desde finales de este año y a lo largo de todo el próximo el ACNUR celebrará su 60º aniversario, el 60º aniversario de la Convención sobre el Estatuto de los Refugiados, el 50º aniversario de la Convención para Reducir los Casos de Apatridia y también el 150º aniversario del nacimiento de Fridjot Nansen, primer Alto Comisionado para los Refugiados.

Guterres instó a los Estados miembros del Comité Ejecutivo a apoyar estos aniversarios con un renovado compromiso para ayudar a los desplazados forzosos en el mundo, tanto a través de nuevas adhesiones a las convenciones sobre apatridia de 1954 y 1961, como por medio de un renovado consenso sobre la protección más allá del alcance de la Convención sobre refugiados de 1951.

"El 14 de diciembre, el ACNUR cumplirá 60 años. Como individuo, no siempre es fácil encontrar el equilibrio entre la sabiduría de la experiencia y la vitalidad de la juventud. Lo mismo puede suceder con una organización," comentó. A los sesenta, espero que hayamos alcanzado la sabiduría que se espera de nosotros, pero espero que no hayamos perdido ni un ápice de nuestra vitalidad".

La reunión anual del Comité Ejecutivo se prolongará durante una semana y se revisarán y aprobarán los programas y presupuestos del ACNUR. También se informará acerca de temas relacionados con la protección y se debatirán numerosos otros temas.

A última hora del lunes, se espera que Guterres entregue el Premio Nansen para los Refugiados de 2010 a Alixandra Fazzina en una ceremonia de gala que se tendrá en el Bâtiment des Forces Motrices de Ginebra. De este modo, se reconocerá la labor realizada por la fotógrafa británica al documentar el sufrimiento experimentado por los desplazados a la fuerza en diferentes países alrededor del mundo.

Por Adrian Edwards en Ginebra