Proyecto Italiano ofrece un camino a la esperanza para los refugiados vulnerables en Etiopía
Proyecto Italiano ofrece un camino a la esperanza para los refugiados vulnerables en Etiopía
Para Barwako de 12 años, otro día pasa en la capital de Etiopía, Addis Abeba, sin poder ir a la escuela. La tímida niña somalí ha estado afectada por una enfermedad de la piel desde que tenía cuatro años y se ha avergonzado de su apariencia durante la mayor parte de su vida.
"Cada vez que voy a la escuela, los niños me insultan y me quitan mi pañuelo", dice ella mientras agarra el pañuelo que cubre parcialmente su cara. "Me dicen que destape mi boca. Estoy asustada porque no quiero que me vean".
La madre de Barwako, Kadija Hussen Abdi, ha luchado para encontrar el tratamiento médico adecuado para su hija. Para sumar a su miseria, la familia afrontó amenazas de los militantes de Al Shabaab en 2010, forzándoles a irse de Somalia y huir a Etiopía.
"Me golpearon varias veces y vinieron a mi casa en dos ocasiones preguntándome dónde estaba mi marido", dice ella. "Ellos me advirtieron de que, si volvían y él no estaba allí, me llevarían a mí".
Durante el desplazamiento, el estado de Barwako empeoró. Una vez en Etiopía, la familia fue capaz de mantener la enfermedad bajo control, pero desgraciadamente Barwako perdió su labio inferior.
"Dijeron que no había nada que ellos pudieran hacer en el país."
Los años de incontables visitas a diferentes médicos en Addis Abeba con la esperanza de conseguir un tratamiento efectivo, no han producido ningún efecto duradero.
"Ha tenido que pasar por varias derivaciones médicas y hospitales", dice Kadija señalando hacia Barwako. "Dijeron que no había nada que ellos pudieran hacer en el país".
Finalmente, está la esperanza. Barwako y su familia han sido seleccionados para trasladarse a Italia como parte del Programa de Corredores Humanitarios, respaldado por el gobierno italiano y dirigido por grupos religiosos italianos.
Con la comunidad de San Egidio en Italia, la Conferencia Italiana de los Obispos, a través de sus organizaciones humanitarias Caritas Italiana y Migrantes, están ayudando a Barwako a trasladarse a un país donde por fin recibirá la atención médica que necesita. Ella es una de las 2.500 personas alrededor del mundo que Italia ha accedido a acoger bajo su programa.
Italia está entre los 193 estados miembros de las Naciones Unidas que adoptaron la Declaración de Nueva York en 2016, comprometiendo a los miembros a compartir la responsabilidad de los refugiados del mundo y apoyar a las comunidades que les acogen. Esto incluyó la redacción de un Marco de Respuesta Integral para los Refugiados (CRRF, por sus siglas en inglés), el cual lanzó Etiopía en noviembre.
Uno de los objetivos importantes del CRRF y el Pacto Mundial sobre Refugiados, es el de expandir el acceso de los refugiados a terceros países a través del reasentamiento u otras formas de admisión, como el Programa de Corredores Humanitarios de Italia.
"Desearía que me pudieran arreglar la boca de modo que pudiera continuar con mi educación y convertirme en profesora."
El 10º Diálogo del Alto Comisionado sobre los Desafíos de Protección que se celebrará el 12 y 13 de diciembre en Ginebra, se enfocará en el progreso hacia un Pacto Mundial sobre Refugiados. La reunión valorará los resultados de las consultas que se realizaron en 2017, y se unirán las lecciones aprendidas hasta el momento de la aplicación del MRCM.
Con la apertura de las opciones para algunos de los más vulnerables para trasladarse a terceros países bajo el Programa de Corredores Humanitarios, Italia está ayudando en el esfuerzo mundial para dar respuestas más completas a los refugiados. A través del programa, 500 refugiados que viven en Etiopía y que son vulnerables por circunstancias personales, edad o salud, o que tienen lazos familiares en Italia, tendrán la oportunidad de reconstruir sus vidas.
Kadija ahora puede imaginar una vida mejor para su hija.
"Sueño con ir a un lugar donde todo el mundo a mi alrededor me ayuda a encontrar un hogar y hallar la paz", dice ella. "Algún sitio donde ella puede recibir un tratamiento y podamos ser felices".
Barwako está a punto de ver su sueño hecho realidad y comenzar una nueva vida.
"Desearía que me pudieran arreglar la boca de modo que pudiera continuar con mi educación y convertirme en profesora", dice ella.
Por Diana Díaz
Gracias a la Voluntaria en Línea Alazne Carro por el apoyo ofrecido con la traducción del inglés de este texto.