ACNUR aprueba un crédito interno para mantener su operación en Yemen
ACNUR aprueba un crédito interno para mantener su operación en Yemen
Para hacer frente al grave déficit de financiación de su operación en Yemen, ACNUR ha aprobado un préstamo interno por valor de 4,7 millones de dólares para así poder continuar con sus programas en favor de miles de desplazados internos (IDPs, por sus siglas en inglés) en este país hasta mediados del año. Este paso constituye una alternativa para evitar tener que reducir o suspender los programas de asistencia y protección de ACNUR. Cualquiera de estas dos últimas opciones habría tenido un impacto negativo e irreversible sobre una población civil que se ha visto desplazada por la fuerza debido a los siete meses de conflictos entre el Gobierno y el movimiento de Al Houti en el norte de Yemen.
La débil respuesta por parte de los donantes durante este año amenaza nuestra capacidad operacional y nuestros esfuerzos de protección para registrar y documentar a unos 250.000 desplazados internos, controlar su situación, así como atender a sus necesidades humanitarias, prestando especial atención a los más vulnerables, es decir, a los niños, a las mujeres y a los ancianos.
Los fondos también se necesitan de manera urgente para ampliar los actuales campamentos de desplazados internos en Al Mazrak, que ya se encuentran superpoblados, para construir nuevos campamentos en el norte del país; para organizar y suministrar material de cobijo, es decir, tiendas y lonas plásticas, así como para proveer material humanitario de primera necesidad, como mantas, esteras, bolsas de aseo, etc.
A día de hoy, hemos recibido menos del 10% de la financiación necesaria. La parte correspondiente a ACNUR del llamamiento consolidado de 2010 de la ONU para Yemen se eleva a 39 millones de dólares.
Mientras tanto, los civiles yemeníes desplazados en los campamentos de Al Mazrak en la provincia de Hajjah mantienen la esperanza, aunque también la cautela, con respecto al primer alto el fuego y su disposición para regresar inmediatamente. En las gobernaciones de Amran y Sa'ada el sentimiento general de la población es similar. Hasta ahora, los movimientos se han limitado a miembros de familia a nivel individual que trataban de evaluar la situación en nombre de toda su familia.
Los informes básicos iniciales por parte de los desplazados internos confirman las dificultades considerables para moverse por las diferentes zonas de la provincia de Sa'ada que se habían visto afectadas por los enfrentamientos. Algunas carreteras siguen bloqueadas y hay zonas plagadas de minas y artillería sin detonar que aún no han sido marcadas. La noticia de que un desplazado interno habría sido víctima de la explosión de una mina ha acrecentado aún más el temor entre los desplazados con respecto a la seguridad del retorno.
Las minas y los artefactos sin detonar representan un serio riesgo para los refugiados y desplazados internos que regresan en todo el mundo. Por este motivo, hacemos una vez más hincapié en la necesidad de actuar con cautela para prevenir nuevas e innecesarias pérdidas de vidas de civiles en Yemen. Antes de abordar cualquier tipo de retorno masivo la prioridad debe ser la retirada de las minas y de la munición sin detonar, así como reanudar los servicios básicos. ACNUR está preparado para ayudar en el proceso de retorno seguro y voluntario.