Ataques de los rebeldes hutus generan desplazamientos en la República Democrática del Congo

Ataques por parte del grupo hutu rebelde, las Fuerzas Democráticas para la Liberación de Ruanda (FDLR), están generando desplazamientos en una amplia zona de la provincia de Kivu Norte en la República Democrática del Congo.

El pasado 20 de enero, fuerzas congoleñas y ruandesas lanzaron una ofensiva para desarmar al FDLR, considerado por Ruanda como la mayor amenaza a su seguridad nacional. El FDLR ha venido tomando represalias contra la población civil y ha lanzado ataques contra poblaciones en Kivu Norte de manera esporádica.

En el territorio de Lubero en Kivu Norte, nuevos ataques contra civiles por parte del FDLR han provocado el desplazamiento de cerca de 30.000 personas en las últimas dos semanas, según las autoridades locales. Las familias recientemente desplazadas en la zona de Lubero han informado de que las incursiones del FDLR se incrementaron durante la primera mitad del mes de marzo, unido a un aumento de las violaciones de derechos humanos. ACNUR está reforzando sus actividades en Masisi e intenta tener presencia en Lubero para una rápida distribución de ayuda humanitaria y protección.

Más al sur, las autoridades locales en el territorio de Masisi dicen que el FDLR llevó a cabo ataques que dejaron al menos tres civiles muertos el pasado 15 de marzo en la carretera de Kashebere-Nyabyondo, al sur de la ciudad de Masisi. Como resultado de estos nuevos ataques, un número desconocido de desplazados internos huyó a la ciudad de Masisi al día siguiente y todavía continúan llegando más. Las autoridades locales en Kikoma, situado a 74 kilómetros al sur de Masisi, informan de que los aldeanos están huyendo en todas direcciones a raíz de los ataques del FDLR del 16 de marzo. Según las autoridades congoleñas en Masisi, el grupo rebelde ha lanzado la amenaza de que continuarán los ataques.

En Rutshuru, a unos 80 kilómetros al norte de Goma, hombres armados atacaron y robaron un coche perteneciente a una ONG internacional el pasado 18 de marzo, aunque no se informó de que hubiera fallecidos. Se trata del último ataque contra trabajadores humanitarios en la región y ACNUR se muestra preocupada ante la posibilidad de que la incesante violencia contra las agencias humanitarias pueda ralentizar la distribución de ayuda a la población desplazada necesitada.

La mayoría de los desplazados por los continuos ataques del FDLR pasan la noche entre la maleza por miedo a ataques y hostigamiento.

Los enfrentamientos del FDLR han dejado a más de 160.000 civiles desplazados desde mediados de enero. En total, se calcula que un millón de personas están desplazadas en Kivu Norte debido a los sucesivos conflictos.