Desplazamientos en la República Democrática del Congo

La Agencia de la ONU para los Refugiados está muy preocupada por el rápido deterioro de la situación de seguridad en Kivu Norte (República Democrática del Congo), donde unas 160.000 personas se han desplazado desde el mes de enero.

Desde el fin de la operación militar conjunta llevada a cabo por las fuerzas armadas congoleñas y ruandesas en Kivu Norte a mediados de febrero contra la milicia hutu, las Fuerzas Democráticas para la Liberación de Ruanda (FDLR), la milicia ha regresado al norte y centro de la provincia, atacando a los civiles y teniendo como objetivo principal a los convoyes de ayuda humanitaria y a las ONG.

Desde el 17 de febrero, la ONU ha registrado 17 incidentes provocados por el FDLR, entre los que se incluyen asesinatos, saqueos, secuestros y violaciones de civiles, así como emboscadas y quema de vehículos. La mayoría de los ataques del FDLR han tenido lugar en la carretera principal entre Butembo-Kanyabayonga, Walikale-Masisi y Rwindi-Rutshuru.

Según nuestro equipo en el terreno, durante las dos últimas semanas el FDLR ha asesinado a 34 personas, secuestrado a cuatro y herido a otras 22. Los días 26 y 27 de febrero, el FDLR tendió emboscadas a varios convoyes de agencias humanitarias que distribuían ayuda a desplazados internos. La mayoría de los desplazamientos y asaltos han tenido lugar en los distritos de Walikale, Masisi y Lubero en Kivu Norte.

Como resultado del recrudecimiento de los ataques del FDLR, nos es cada vez más difícil llegar a los nuevos desplazados y cubrir sus necesidades. Ayer, un equipo conjunto de la ONU que iba de Goma a Remeka tuvo que abandonar su misión cerca de Masisi por motivos de seguridad.

Este nuevo desplazamiento de población aumenta la presión sobre la dramática situación humanitaria en Kivu Norte, región que cuenta con aproximadamente 850.000 desplazados internos. Esta cifra incluye a unas 250.000 personas que se han visto obligadas a huir desde el pasado mes de agosto, muchos de los cuales ya habían tenido que desplazarse en múltiples ocasiones.

Paralelamente, la situación de la seguridad en el territorio de Haut Uele en el noreste de la RDC sigue siendo instable. Los ataques perpetrados por el grupo rebelde ugandés, el Ejército de Resistencia del Señor (LRA, por sus siglas en inglés), se intensificaron de nuevo a finales de febrero, tras la relativa calma registrada a principios de mes. Según nuestro equipo en Dungu, en el centro de la región de Haut Uele, elementos dispersos del LRA siguen atacando a la población civil al azar y se han recibido varios informes sobre casos de violaciones y saqueos.

Los ataques del LRA a pueblos en la región de Tora, al sureste de Dungu, han provocado nuevos desplazamientos y han frustrado nuestros esfuerzos de evaluar y registrar el número de personas obligadas a huir de sus hogares. Hasta el momento hemos registrado a más de 43.000 desplazados solamente en la región de Dungu.

Los habitantes de la Provincia Oriental, donde se encuentra Haut Uele, se han visto expuestos a ataques brutales y mortales cometidos por el LRA desde el pasado mes de septiembre. Estimamos que el número total de civiles congoleños desplazados por los asaltos del LRA en esta región aislada sobrepasa en este momento los 140.000. Más de 900 congoleños han sido asesinados por el grupo rebelde ugandés durante el mismo periodo. Además, unos 16.000 refugiados congoleños han atravesado la frontera hacia Sur Sudán, huyendo de la escalada de violencia. Se encuentran actualmente refugiados en las regiones de Ezo, Yambio y Yei.

Seguimos enviando ayuda de emergencia a esta parte de la RDC. Durante el mes de febrero hemos remitido otras 32 toneladas de materiales para cobijo y asistencia. Hoy comienza la distribución de ayuda a unos 19.000 congoleños desplazados internos en las regiones de Ariwara e Ingbokolo, cerca de la frontera de la RDC con Uganda.