Los niños, las principales víctimas de la crisis de refugiados somalíes
Los niños, las principales víctimas de la crisis de refugiados somalíes
Los niños somalíes son las mayores víctimas de la crisis de refugiados que afecta al cuerno de África, según los últimos datos de perfiles recopilados por ACNUR en Etiopía. El análisis demográfico más reciente de la llegada de somalíes a Etiopía muestra que los niños menores de 18 años constituyen el grupo más numeroso de refugiados. En total, representan cerca del 80% de los 121.000 refugiados acogidos en cuatro campos situados en el sudeste de Etiopía, en la región de Dollo Ado.
La situación más extrema se da en el campo de Kobe, donde los menores de edad representan el 88,6% de la población del campo, que sobrepasa las 25.000 personas. La mayoría de las familias son hogares monoparentales encabezados por mujeres con un gran número de niños, entre ellos parientes jóvenes y huérfanos a los que acogen.
Seguimos preocupados por las altas tasas de mortalidad asociadas a la desnutrición aguda severa y a las enfermedades. También es preocupante el número de menores no acompañados y separados. Las estimaciones iniciales indican que este número podría llegar incluso a los 2.500 niños en los cuatro campos. Estamos llevando a cabo un análisis esta semana en los campos de refugiados en Dollo Ado para entender mejor el alcance del problema y determinar las medidas que deben tomarse teniendo en cuenta el interés superior de estos menores.
Muchas mujeres refugiadas han contado a nuestros equipos en Etiopía que viajar no es seguro para los hombres somalíes. Temen el reclutamiento forzoso por parte de grupos armados y milicias locales. En muchos casos los hombres se quedan en Somalia para proteger las pocas propiedades que pueda tener la familia, cuidar de los que están demasiado enfermos para viajar y atender el ganado que les quede. Algunas familias sencillamente no tienen medios para que todos sus miembros hagan el viaje juntos, así que las mujeres y los niños son los primeros en partir. Sin embargo, durante las últimas semanas nuestros equipos han observado que están llegando más hombres solos desde Somalia para reunirse con sus familias.
Mientras, en Somalia, ACNUR está complementando las distribuciones de ayuda alimentaria proporcionada por otras organizaciones en las zonas del sur afectadas por la hambruna. Nos estamos preparando para distribuir 7.500 Paquetes de Asistencia de Emergencia (EAPs por sus siglas en inglés) con lonas de plástico, esteras y mantas para dormir, bidones y utensilios de cocina para cerca de 50.000 personas en la región de Bay, donde se acaba de declarar la hambruna. Otras 70.000 personas serán atendidas en Bajo Shabelle, también declarada en hambruna. Más de 50.000 personas se beneficiarán de las distribuciones en Mogadiscio y otras 30.000 en las regiones fronterizas de Gedo y Bajo Juba. En total, a finales de agosto ACNUR ha llegado a más de 220.000 personas, y su objetivo es alcanzar a otras 180.000 más de aquí a finales de septiembre.
Según Bruno Geddo, Representante de ACNUR en Somalia, "es imprescindible reforzar lo antes posible las distribuciones masivas de ayuda para atender a los más necesitados en el interior de Somalia si queremos mantener la tendencia a la baja en los flujos hacia Etiopía y Kenia". Bruno Geddo acaba de regresar de Dollow, en la frontera entre Somalia y Etiopía, y de Mogadiscio, y ha declarado que los desplazados internos con los que ha hablado siguen expresando el deseo de permanecer en su país, más que de cruzar una frontera internacional en busca de asistencia.