Mosul: tras nueva ofensiva, crece la necesidad de cobijo para los desplazados
Mosul: tras nueva ofensiva, crece la necesidad de cobijo para los desplazados
Con las nuevas operaciones militares en Mosul, ACNUR, la Agencia de la ONU para los Refugiados, está centrando sus esfuerzos en la construcción de campamentos para acoger a muchas de las personas que podrían verse obligadas a desplazarse a raíz de los nuevos combates.
Se estima que más de 250.000 personas podrían ser desplazadas. Casi 217.000 personas han huido de las hostilidades desde el 17 de octubre, de las cuales, alrededor de 160.000 permanecen todavía desplazadas. Otras han vuelto a sus hogares en áreas recientemente recuperadas. Sin embargo, la situación continúa siendo incierta y aterradora para los que están afectados o atrapados por la contienda.
Ahora mismo, ACNUR tiene ocho campos abiertos o terminados y uno en construcción. La Agencia de la ONU para los Refugiados tiene previsto el inicio de las obras en otra ubicación (Hamam al-Alil), al sur de Mosul. Actualmente, se dispone de capacidad para otras 12.700 personas en los tres campos situados en el este de la ciudad (Hasansham U3, Khazer M1 y M2). También está previsto dotar de 1.000 parcelas adicionales al campo de Khazer M2. De igual manera, hay espacio para 14.400 personas en el recientemente construido campamento de ACNUR en Chamakor, donde ya se han montado 500 tiendas de campaña.
El gobierno iraquí ha decidido en un principio llevar a la gente desplazada desde el oeste de Mosul a los campos del este de la ciudad, al tiempo que se está ampliando la capacidad de acogida en el sur. ACNUR ha recibido la petición de dar apoyo en el nuevo espacio establecido por el gobierno en Hamam Al -- Alil, situado a 20 kilómetros al sur de Mosul, pues se espera que numerosos desplazados del oeste de Mosul lleguen a pie a Hamam Al-Alil. En este espacio se acogerá a un máximo de 60.000 personas. Uno de los campamentos de este lugar será construido por ACNUR. Otro, que ha sido construido por el gobierno y que cuenta con capacidad para 24.000 personas, estará respaldado también por ACNUR.
Teniendo en cuenta el éxodo previsto de más de 250.000 personas, resultará imposible acomodar a tal cantidad de población en los terrenos disponibles. ACNUR ha identificado otra superficie que podría ser utilizada para establecer campamentos una vez cambien las líneas de frente del conflicto.
Mientras tanto, las condiciones en el oeste de la ciudad, que está densamente poblado, están empeorando, según los testimonios y los informes, y por ello aumenta la preocupación por el bienestar el bienestar de los civiles. Hay escasez de comida, agua, combustible y medicamentos. La mitad de las tiendas de alimentación están cerradas y la mayor parte de la población tiene solo acceso a agua sin tratar. Los precios de la comida se están disparando y hay informes sobre familias que están quemando sus muebles, ropa y plásticos para protegerse del frío.
Durante la batalla por el este de Mosul, la protección de los civiles ha sido prioritaria en la planificación militar y en las actividades, y ACNUR espera que se siga respetando este principio. Sin embargo, la nueva batalla será diferente. El oeste de la ciudad tiene una alta densidad de población, con numerosas calles estrechas, y el combate será calle por calle. Los grupos armados han construido una red de túneles.
La inseguridad y los recientes ataques suicidas en el este de Mosul han dado como resultado que algunas familias, que habían optado por volver a sus casas, hayan tenido que regresar a los campamentos en busca de seguridad.