República Centroafricana: Desplazados internos enfrentan gravísimas privaciones

Una encuesta realizada por el ACNUR y el Consejo Danés para los Refugiados entre las personas desplazadas internamente en el norte de la República Centroafricana, en particular en la zona de Ndélé, ha revelado problemas extremadamente graves, incluyendo una alta incidencia de matrimonios de niñas y adolescentes y un amplio uso del trabajo infantil.

La encuesta cubrió una muestra de 300 familias, dentro de una población de 17.000 personas en la zona. Una de cada cinco familias informó de la pérdida de al menos un familiar en los primeros seis meses de 2011, debido a la inseguridad, la falta de servicios de salud o la escasez de alimentos. El 32,5 por ciento de los niños de edad comprendida entre seis y quince años resultó ser usado en el trabajo infantil.

El treinta por ciento de las niñas de edad comprendida entre los 12 y 17 años fue vendido para matrimonios. Las familias desplazadas internamente encuestadas informaron el ACNUR que vendían a sus hijas aún niñas para el matrimonio a miembros de las comunidades locales y enviaban a los niños a trabajar en los campos o a pescar para estas comunidades en cambio de vivienda, comida o dinero. Los funcionarios del ACNUR también fueron informados de violaciones ejecutadas por los grupos armados.

La encuesta fue realizada principalmente entre mayo y septiembre y se extenderá a otros pueblos en la zona. Las personas desplazadas en la zona casi no tenían acceso a la ayuda humanitaria antes de junio de este año, cuando fue firmado un alto el fuego entre los rebeldes de la Convención de Patriotas para la Justicia y la Paz – uno de los principales grupos rebeldes en la zona – y el Gobierno de la República Centroafricana. Antes del acuerdo de paz los únicos civiles que podían recibir asistencia humanitaria eran los que podían llegar a la ciudad de Ndélé.

El ACNUR espera que las mejoras en la situación de seguridad puedan permitir una mayor presencia de la agencia en esta parte del país para responder a las necesidades de asistencia y protección de la población desplazada. Hasta la fecha, los funcionarios del ACNUR han realizado misiones en esta zona saliendo de la oficina de la agencia en Kaga Bandoro, 350 kilómetros al sureste. El viaje hasta Ndélé dura una 11 horas y eso dificulta aún más la entrega de ayuda.

Ndélé se encuentra en la prefectura de Bamingui Bangoran, a 700 kilómetros de Bangui, la capital de la República Centroafricana. En pasado esta zona era considerada el granero del país, pero debido al proliferar de grupos rebeldes y bandidos desde 2005 muchos de sus residentes han sido obligados a vivir en el monte, sin poder practicar la agricultura.

En la República Centroafricana el ACNUR asiste a más de 176.000 desplazados internos y cerca de 20.000 refugiados, en su mayoría procedentes de Darfur y República Democrática del Congo.