Somalia: Mal tiempo y conflicto exacerban la difícil situación de la población civil
Somalia: Mal tiempo y conflicto exacerban la difícil situación de la población civil
La persistencia del conflicto y el mal tiempo en Somalia están agravando la situación humanitaria, ya de por sí desesperada. Nuestro personal ubicado en la ciudad fronteriza de Dobley, en el suroeste del país, nos informa de que el número de refugiados que cruza a Kenia ha ido disminuyendo. Las lluvias que han hecho intransitables los caminos y el temor a quedar atrapados en el conflicto son las dos principales razones para esta reducción.
A la ciudad de Dobley, situada a tan sólo 18 kilómetros de la frontera, siguen llegando civiles. Estas personas han explicado a nuestro personal que han huido a causa de los rumores acerca de una inminente confrontación militar en la zona. También han recibido amenazas de Al Shabaab obligándoles a volver a sus pueblos de origen. El pasado fin de semana, seis camiones que transportaban a cerca de 180 personas desplazadas del distrito de Afgooye, originarias en su mayoría del campo de desplazados internos K50, llegó a Dobley tras viajar durante 27 días por carreteras inundadas. Los recién llegados dijeron que habían recibido órdenes de Al Shabaab para regresar a sus granjas, pero que habían decidido ir a Dobley en busca de ayuda humanitaria.
En Mogadiscio, ACNUR, junto con otras agencias socias, está finalizando una evaluación de la situación de los desplazados internos en la capital somalí. La evaluación tiene por objeto localizar donde se encuentran los asentamientos de desplazados y obtener datos básicos sobre demografía y tamaño de los hogares. Se han registrado las coordenadas GPS de todos los asentamientos en 14 de los 16 distritos de Mogadiscio (dos de ellos no eran accesibles por razones de seguridad) y más de 500 encuestadores han llevado a cabo un estudio de 7.000 familias. Los resultados preliminares revelan que hay cerca de 300 asentamientos de desplazados internos de diferentes tamaños, a pesar de que sigue pendiente la exploración GPS de dos de los barrios. El dato acumulado de la población desplazada en Mogadiscio será presentado a los funcionarios del Gobierno Federal de Transición en Mogadiscio la semana que viene, antes de ser compartido con la comunidad humanitaria.
Paralelamente, en Nairobi, ayer fue publicado un informe que ha contado con el apoyo de ACNUR. En él se examinan los daños causados a los civiles por el conflicto militar y los medios que podrían emplearse para hacerle frente. El informe ha sido preparado por la ONG internacional CIVIC a partir de más de 100 entrevistas mantenidas con civiles somalíes, agencias humanitarias, Naciones Unidas, donantes internacionales y el personal de AMISOM entre febrero y julio en Mogadiscio, en el complejo de campos de refugiados de Dadaab (Kenia) y entre la diáspora somalí de todo el mundo. El informe "Daños civiles en Somalia: Creación de una respuesta adecuada" se centra en la asistencia a los civiles afectados por el conflicto. Actualmente no existe ninguna obligación legal para las partes en el conflicto de reparar a los civiles afectados por las operaciones militares.
ACNUR hace hincapié en el imperativo moral de indemnizar a la población civil en el marco de las actividades militares que atentan contra la vida, la integridad física y la libertad de las personas y sus bienes. También instamos a los donantes a proporcionar el apoyo económico necesario para la puesta en marcha de las recomendaciones que figuran en este informe, de forma que AMISOM pueda llevar a cabo una política eficaz de compensación.
Entre las recomendaciones de este informe de 60 páginas se encuentra el establecimiento de un mecanismo para supervisar, analizar, investigar y responder a todos los daños causados a los civiles. El informe también hace un llamamiento a todas las partes en conflicto en Somalia a que cesen inmediatamente los ataques contra los civiles y los organismos humanitarios.