Guterres lanza un llamamiento para intensificar la asistencia humanitaria en Camerún
Guterres lanza un llamamiento para intensificar la asistencia humanitaria en Camerún
CAMPAMENTO MINAWAO, Camerún, 26 de marzo de 2015 (ACNUR) – El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, António Guterres, lanzó un llamamiento para intensificar la asistencia humanitaria y para el desarrollo en Camerún, tras recorrer un campamento que alberga a miles de refugiados, quienes huyeron de la violencia en la vecina Nigeria.
"Camerún ha dado muestras de una generosidad extraordinaria al abrir sus fronteras, puertas, hogares y corazones a más de 350 mil refugiados provenientes de Nigeria y de la República Centroafricana", destacó Guterres el pasado miércoles, tras escuchar las experiencias de los refugiados en el campamento de Minawao, sito en la región del Extremo Norte de Camerún.
Asimismo, agregó que "Camerún también está sufriendo el impacto de la dramática situación de seguridad en la región del Extremo Norte a raíz de los eventos en Nigeria". En la actualidad, esta zona alberga alrededor de 74 mil refugiados nigerianos, 42 mil de los cuales verificados por el ACNUR.
Sito a 90 kilómetros de la frágil frontera que divide a Nigeria y Camerún, el campamento de Minawao abrió sus puertas a los refugiados en julio de 2013; en la actualidad, alberga a más de 33 mil víctimas del conflicto que oprime al noreste de Nigeria. En su visita al campamento, Guterres fue acompañado por Bakary Midjiyawa, gobernador de esta región semiárida, diversos representantes de organismos medioambientales y miembros de la comunidad de donantes.
"Además de brindar un espacio de protección que reviste vital importancia para los refugiados, hoy en día Camerún se encuentra en la primera línea de defensa de la comunidad internacional", afirmó Guterres.
"Por consiguiente, Camerún necesita y merece una mayor solidaridad, tanto en el plano humanitario, como desde el punto vista económico y del desarrollo", afirmó el jefe del ACNUR.
"Espero que la comunidad internacional comprenda las necesidades de Camerún y responda a la enorme generosidad de su pueblo."
A su vez, el Alto Comisionado escuchó los relatos de los refugiados, quienes manifestaron haber sido víctimas de la violencia en primera persona o bien testigo de ataques a sus familiares y allegados. Asimismo, denunciaron secuestros.
"Atacaron mi pueblo en el estado de Borno durante la noche; dispararon a los habitantes e incendiaron sus viviendas", declaró Mariam, de treinta años de edad y oriunda de Nigeria. "Uno de mis hermanos recibió un disparo y murió en el ataque".
"Escapé del pueblo con mi marido y nuestros tres hijos. Llegamos a Camerún caminando. Nos refugiamos en un pueblo fronterizo por unos meses, hasta que los ataques alcanzaron la región y debimos trasladarnos al campamento de Minawao".
Djumai, de 60 años, relató a Guterres que el grupo insurgente ingresó a su pueblo y asesinó a quienes se rehusaron a convertirse a la ideología impuesta. "Capturaron a mi hijo, lo golpearon y torturaron. Luego lo ataron a unos pilotes de madera. Así fue como murió".
Ambas mujeres agradecieron al ACNUR por la asistencia que reciben en el campamento; no obstante, la organización intenta cubrir ciertas deficiencias. El acceso a agua potable constituye uno de los principales desafíos que enfrenta Minawao, con recursos subterráneos limitados.
Veintiún pozos de perforación y camiones cisterna de suministro diario proporcionan once litros de agua per cápita por día; esta cantidad resulta inferior al estándar de veinte litros declarados necesarios por el ACNUR para no considerarse en estado de emergencia. No obstante, la agencia para los refugiados trabaja en la perforación de diez pozos adicionales y se aboca a la búsqueda, de manera conjunta con las autoridades, de un lugar adecuado para instalar un tercer campo de refugiados.
Asimismo, el ACNUR ha intensificado la asistencia a individuos desplazados dentro de su país de origen. Al menos 96 mil habitantes de Camerún se han visto forzados a trasladarse debido a los ataques recurrentes de los grupos insurgentes nigerianos. Guterres ha entrevistado a algunos de ellos y les ha prometido asistencia.
El Alto Comisionado resaltó la importancia de intensificar la asistencia internacional brindada tanto a los refugiados y desplazados como a las comunidades que los albergan y comparten con ellos todo lo que poseen.
Es por ello que instó a incrementar las donaciones, ya que los fondos recaudados al presente resultan insuficientes para garantizar la asistencia humanitaria necesaria. El ACNUR sólo ha recibido un nueve por ciento de los fondos que la situación de Nigeria requiere.
"Entiendo que en la actualidad el apoyo de la comunidad internacional se concentre en Siria o en Irak", concedió Guterres. "Aun así, Camerún enfrenta una situación similar y requiere un nivel de compromiso y apoyo equivalentes, que esperamos la comunidad internacional sea capaz de demostrar".
El jueves pasado Guterres viajó a la República de Chad para informarse sobre la situación de los 18 mil refugiados nigerianos que encontraron protección en la zona del Lago Chad. En su mayor parte, habían huido de los ataques letales sufridos por la ciudad de Baga y sus zonas aledañas a principios de enero.
Por Hélène Caux, desde el campamento de Minawao, Camerún
Gracias a la Voluntaria en Línea Graciana García por el apoyo ofrecido con la traducción del inglés de este texto.