ACNUR y países africanos de acogida acuerdan un paso final para solucionar la situación de los refugiados ruandeses
ACNUR y países africanos de acogida acuerdan un paso final para solucionar la situación de los refugiados ruandeses
El ACNUR (la Agencia de la ONU para los Refugiados), las delegaciones de los países de africanos y la Unión Africana acordaron hoy un paso final para terminar con la situación de larga duración de los refugiados de Ruanda, después de siete años de negociaciones.
La reunión ministerial, organizada por el ACNUR en Ginebra, marca la fase final de una estrategia de soluciones integrales para los refugiados de Ruanda que huyeron de su país entre 1959 y 1998 para escapar de la violencia interétnica y el conflicto armado.
"En un mundo donde hay más de 21 millones de refugiados, la atención no debería estar centrada solo en dar protección y asistencia humanitaria, sino en identificar soluciones de forma proactiva. La reunión de hoy constituye un paso crucial para brindar soluciones para los muchos refugiados ruandeses que buscaron asilo entre 1959 y 1998, así como para terminar una de las situaciones de refugiados de más larga duración en África", dijo el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados, Filippo Grandi.
Los participantes, que procedían de Ruanda, así como de los principales países de acogida: Angola, Burundi, Camerún, República Democrática del Congo, Kenia, Malawi, República del Congo, Sudáfrica, Uganda, Zambia y Zimbabue, reafirmaron su compromiso para concluir la estrategia, la cual fue presentada en octubre de 2009, a finales del próximo año.
Destacando el progreso realizado desde la última reunión ministerial sobre la situación de los refugiados de Ruanda, los gobiernos reiteraron su disposición de brindar una condición legal alternativa a aquellos refugiados que elijan integrarse localmente, y los alentaron a hacer uso de esta oportunidad.
Todos los Estados confirmaron que continuarían promoviendo la opción de la repatriación voluntaria, segura y digna a Ruanda, incluyendo brindarles a los refugiados información completa de las condiciones del retorno. Al mismo tiempo, el ACNUR acordó brindar un paquete de retorno mejorado, y hacer la transición progresiva del apoyo en especie a una forma de asistencia más basada en el dinero en efectivo para asegurar una reintegración sostenible.
Los países que han invocado la cláusula de cesación aseguraron que ningún refugiado cuya condición de refugiado se mantenga después de un proceso de exención, seguiría recibiendo protección internacional y apoyo.
El genocidio en 1994, seguido por los enfrentamientos armados en el noroeste del país en 1997 y 1998, causaron que más de 3,5 millones de ruandeses huyeran en busca de seguridad. Todos, menos 268.500 refugiados, han encontrado una solución que les permite cerrar este difícil capítulo.
En el cierre, Alto Comisionado Asistente para la Protección del ACNUR, Volker Türk, subrayó que la organización está dispuesta a seguir trabajando con los Estados que acogen a refugiados ruandeses para encontrar soluciones de acuerdo con la estrategia y dentro del tiempo establecido de diciembre de 2017, y alentó a todos a hacer un esfuerzo adicional.