Un refugiado afgano en Irán vuela alto de nuevo en su país

TEHERÁN, República Islámica de Irán, 5 de agosto de 2013 (ACNUR) – Veintiocho años después de que su familia huyera de Afganistán hacia el vecino Irán, Seyyed Zia Hosseini ha regresado a su hogar desde el país que lo acogió y le dio la educación que le permitirá ayudar a reconstruir su tierra natal.

Hosseini es uno de los muchos refugiados afganos que están regresando a su país después de graduarse con éxito en universidades iraníes. Dos años después de su retorno, Hosseini es consultor del Ministerio Afgano de Urbanización. "Incluso tengo la posibilidad de convertirme en Ministro" dice.

Hosseini tenía un año cuando huyó con su madre y su hermana de cuatro años de Sar-e-Pol, en Afganistán, primero hacia Pakistán y luego a la República Islámica de Irán, donde se asentaron en la ciudad sagrada de Qom.

Hosseini fue un buen estudiante y logró una beca del gobierno iraní que le llevó a obtener un doctorado en Gestión y Desarrollo de Proyectos en la Universidad de Teherán.

"Tanto yo como mi hermana, que también tiene un doctorado y es profesora en la universidad en Qom, estudiamos en Irán y estamos contentos de haber tenido la suerte suficiente para llegar tan lejos" dice Hosseini. Tras su graduación se casó y volvió a Afganistán con su mujer.

Gracias a la generosidad de Irán a la hora de facilitar el acceso a la educación para los refugiados, una generación de jóvenes refugiados afganos en el país está recuperando la ilusión por los estudios. Según un censo de 2009 del gobierno iraní, la tasa de alfabetización entre los refugiados afganos ha aumentado del 6% en 1981 al 69% en 2009.

ACNUR, que se ha tomado muy en serio la educación de los refugiados, está agradecido a Irán. La Agencia de la ONU para los Refugiados ha apoyado al Ministerio de Educación iraní en su esfuerzo por ofrecer educación primaria y secundaria a los estudiantes refugiados y programas educativos adicionales para atender las necesidades más críticas de los refugiados.

Otro elemento importante ha sido la iniciativa del gobierno iraní de ofrecer a refugiados que no están en edad escolar la oportunidad de ponerse al día con clases de alfabetización llevadas a cabo por el Ministerio de Educación.

"ACNUR interviene para aliviar la carga que suponen las tasas educativas para las familias refugiadas, permitiéndoles enviar a sus hijos a la escuela, incluyendo a las niñas" dice Bernard Doyle, Representante de ACNUR en Irán, a tiempo que elogia al gobierno iraní por sus años de esfuerzos para permitir el acceso a la educación a los refugiados.

Entre los proyectos educativos implementados por ACNUR se encuentra la construcción de escuelas en zonas pobladas por refugiados, la provisión de equipos y materiales educativos a las escuelas donde la mayoría de los alumnos son afganos, el equipamiento de bibliotecas en los asentamientos y zonas urbanas, el transporte de estudiantes desde los asentamientos y la ayuda a los alumnos más vulnerables para cubrir parte de los costes de su educación, como son las tasas de matrícula, los libros y el material escolar.

Aunque Hosseini disfrutó de todas las oportunidades educativas que le ofreció Irán, él está convencido de que regresar a la tierra natal es la mejor solución para los refugiados. Hosseini ha disfrutado de buenas oportunidades y espera poder quedarse en Afganistán.

"Aunque sé que no todos los refugiados tienen las mismas condiciones y no pueden regresar, me gustaría decirles a los afganos que independientemente del país al que vayan, éste no será su hogar", dice Hosseini. "Sería mejor si regresaran y pudieran devolver los beneficios de la educación recibida fuera, usando las habilidades que han adquirido para ayudar a reconstruir su propio país".

Por Dina Faramarzi en Teherán, República Islámica de Irán